sábado, 14 de diciembre de 2019

No veo más allá. Parece como si mis ojos estuvieran recubiertos por un cristal empapado por el vaho, una niebla densa que no se va. Me duele mucho ser yo. Me duele querer y sentir y no tener nada que recibir. Si pudiera retroceder, no sé lo que cambiaría. Si pudiera elegir nacer o no, creo que sabría bien lo que hacer. Creo que si pudiera elegir a las personas que conozco y a las que no, creo que aún estaría más sola de lo que estoy. Me odio. 

miércoles, 11 de diciembre de 2019

Sólo sé.

No sé nada del amor, pero he amado mucho. Sólo sé que quema, que hiela, que delata, que chispea, brota y se desborda. 
Sólo sé que burbujea, que explota, que calma, que cura, que lame y arropa y envuelve y protege, y arrulla, y mece, y duerme. 
Sólo sé que también muerde, y escupe, y destroza, y solloza, y pincha, y hiere, y derrite el alma a cualquiera que esté dispuesto a dejarse hacer añicos. A cualquiera que esté dispuesto a ser pólvora, y polvo después. 
Sólo sé que el amor vive, tal vez, y sólo tal vez; para dejarse morir.